viernes, 19 de diciembre de 2008

Artículo de Herminio Picazo sobre la Fundación Sierra Minera

Los diez años que cumple la Fundación Sierra Minera han merecido este artículo de Herminio Picazo en La Opinión.

Diez años (y más) de Sierra Minera

Se han cumplido diez años desde que comenzó una de las aventuras asociativas, socioeconómicas, ambientales y culturales más interesantes de nuestra tierra: la Fundación Sierra Minera.

Esta joven pero ya madurita Fundación es una organización participativa sin ánimo de lucro que representa lo que se ha venido en denominar "tercer sector", aglutinando el tejido asociativo de los pueblos de la Sierra Minera de La Unión y Cartagena. Sus objetivos son promover el desarrollo sostenible de la Sierra mediante la recuperación de su patrimonio cultural y ambiental, la formación e inserción socio-laboral de la población y el fortalecimiento de su tejido asociativo. Que no es poco.


Sin duda, tanto la extraña, desolada, doliente, pero impactante belleza del singular paisaje minero, junto con la cultura asociada al viejo tejido industrial y las nuevas oportunidades que ofrecen el turismo y la conservación ambiental, proponen un escenario en el que la Fundación Sierra Minera y todas las instituciones tienen mucho que decir para el presente y de cara al futuro.


Porque la Sierra Minera es una oportunidad de oro para demostrar que la sociedad sabe reaccionar contemporáneamente para resolver -e incluso aprovechar positivamente- problemas ambientales que son producto de un tiempo en el que éramos más suicidas de lo que en la actualidad somos, que no es poco decir. Peñarroya fue durante muchos años una realidad oculta e inmutable; un enorme tubo digestivo que ingería montañas, metabolizaba en su interior los productos y excretaba en Portmán los estériles mineros, envileciendo el Mediterráneo en uno de sus lugares más hermosos.


Pocas fueron las voces que en aquellos Años Obscuros pudieron alzarse para denunciar el tremendo problema ambiental que sufría la zona, y menos fueron las que ahondaron en las razones profundas que mantenían Portmán sucio e inmutable: la irresponsabilidad de los tecnócratas de la época al servicio de una economía artificiosa y cuyo valor añadido recalaba en bancos franceses, la primacía supuestamente estratégica de los Altos Intereses de la Nación, la apuesta suicida por el "desarrollo" egoísta del aquí y el ahora, manifiestamente incompatible con cualquier esperanza de desarrollo futuro.  


Pero junto con la barbaridad contaminante de Portmán, los siglos de actividad minera en la Sierra dejaron lo que ahora es -si se mira con ojos medianamente sensibles- un paisaje cultural e industrial que es una verdadera sorpresa para propios y extraños.
La recuperación de la Bahía de Portmán, la puesta en valor de los paisajes, culturales, las "sinergias" -y perdonen la palabreja- con las excelentes representaciones de patrimonio natural de Calblanque, Peña del Águila y Monte de las Cenizas, son imprescindibles líneas de trabajo de las que se puede aprovechar, y de qué manera, todo un municipio como el de La Unión, que no acaba de salir al completo de la recesión impuesta por el anterior abandono de la minería.
Este es el momento de dar un empujón al desarrollo sostenible de la comarca, aprovechando las opciones socioeconómicas y ambientales de la zona, las oportunidades para el aprovechamiento turístico sostenible basado particularmente en su valioso patrimonio industrial minero, y el compromiso -que ojala sea el máximo de lo posible- de las administraciones y de los sectores asociativos y privados que tienen tanto que decir para el futuro.


La Fundación Sierra Minera, ya con diez años de intensa actividad, es un ejemplo de que el futuro para la zona depende de todos. Y de que ese futuro será luminoso si realmente los conceptos de la sostenibilidad -ambiental, cultural, socioeconómica- se hacen ciertos en una comarca que lo tiene todo para hacerlo posible.

En el aire el inicio de las obras de regeneración de la Bahía

El periódico La Verdad informa de las declaraciones (o no-declaraciones) del Delegado del Gobierno sobre el inicio de las obras de regeneración de la Bahía. Podemos leer la noticia en este enlace.

Portmán y el Gorguel, artículo de José Haro en La Opinión

Por su interés, reproducimos el artículo de Pepe Haro, concejal de IU-LV en el Ayuntamiento de La Unión, sobre la construcción del puerto de contenedores en El Gorguel.

Portmán y El Gorguel

Es difícil imaginar una combinación más desafortunada de dos proyectos que se consideran estratégicos para nuestra Región. Me refiero a la regeneración de la Bahía de Portmán y a la propuesta de dársena de contenedores en el entorno de la playa de El Gorguel. Tal como se ha planteado esta última, no sólo resulta inviable por las graves implicaciones que conlleva, sino que además anula al primero. Por consiguiente, las cabezas pensantes de nuestra región y de nuestro país francamente no se han lucido: en lugar de conseguir sinergias y efecto sumatorio en la formulación de dos actuaciones valoradas como imprescindibles, han provocado la generación de incertidumbre en torno a la viabilidad de ambas. Efectivamente, la propuesta remitida por la Autoridad Portuaria al Ministerio de Fomento para la construcción de una dársena en El Gorguel ha sido desmenuzada por un estudio de la Universidad, encargado por la Fundación Sierra Minera, cuyas conclusiones no dejan lugar a dudas. En primer lugar, su ubicación en la Sierra de la Fausilla, reconocida como LIC y ZEPA, arrastra graves consecuencias ambientales, con afectación de hábitats raros o muy raros y reducción de fauna y flora protegidas. El impacto sobre el medio marino será igualmente relevante, así como sobre el patrimonio geológico de la zona, deteriorando gravemente Lugares de Interés Geológico (Ventana tectónica de Cala del Caballo, Cala del Gorguel y barranco del Gorguel) y una parte sustancial del patrimonio arqueológico y minero del entorno. Por no hablar de la evidente incompatibilidad entre lo que se pretende ejecutar en el Gorguel y el planteamiento turístico sostenible que acompaña la regeneración de la Bahía de Portmán y la Sierra Minera, la cual está declarada como de Interés Regional. El plan de Viudes neutraliza los potenciales valores turísticos, no sólo de una Bahía y Sierra recuperadas, sino también de espacios adyacentes como la Cala del Caballo, la rambla del Avenque y el valle del Gorguel, de gran valor por su patrimonio natural, geológico y cultural. Por tanto, nos encontramos ante una propuesta insostenible en sí misma que, además, presenta como grave efecto colateral el hecho de ser incompatible con la puesta en valor turística, ambiental y cultural de toda esa amplia franja de la Sierra Minera. El problema es que esa incompatibilidad se está resolviendo, desde el ámbito político, en favor de la insostenibilidad. El Gobierno Regional del PP hace tiempo que ofrece su respaldo incondicional a la idea de Viudes.a través del Plan Estratégico Regional. El problema es que la firme oposición inicial del PSOE regional se está transmutando, primero, en una ambigüedad vergonzante que podría conducir, a corto plazo, a un respaldo explícito. Hace unos días, el Grupo Parlamentario Socialista de nuestra Asamblea Regional enmendaba la totalidad de una Moción de IU+LV que, recogiendo el sentir tanto del tejido asociativo de la zona como del propio Ayuntamiento de La Unión, propugnaba el rechazo de la Cámara al macropuerto en el Gorguel. Los socialistas pretextaban la necesidad de realizar estudios sobre el asunto para adoptar una posición definitiva. Sus compañeros del Ayuntamiento de La Unión, al igual que las otras dos fuerzas políticas del Consistorio, no parecen necesitar estudios para expresar su oposición a un proyecto descabellado; rechazo que hasta hace no mucho también compartía la dirección regional socialista. En paralelo a este avance político de la macroterminal de contenedores, se produce un nuevo y enésimo retroceso en la ejecución de la regeneración la bahía colmatada por estériles mineros, ya que, según compromisos adquiridos, a finales de 2008 deberían estar en licitación las obras. Quizá por ello en los presupuestos para 2009, tan sólo se recogen 2,9 millones para dichas obras, dentro de una inversión plurianual de 8,2 millones(hasta 2010), en contraste con el montante total de la inversión pública prevista, que asciende a 77,8 millones de euros.

Nuestra clase política regional tiene que recapacitar, y apostar decididamente por la regeneración de Portmán y el desarrollo turístico sostenible, lo cual no es incompatible con una terminal de contenedores en puerto seco, como se propone desde diversos ámbitos. En lugar de arruinar dos proyectos, hagámoslos compatibles y sostenibles.

Actualizándonos sobre El Gorguel

Después de un período de silencio, volvemos a contar la actualidad del proyecto de macropuerto en El Gorguel

En primer lugar, La opinión nos ofrece, con un tono triunfalista, la noticia de que Puertos del Estado ha dado un primer paso a favor de la construcción, como podemos leer aquí. Una de las condiciones que podrían secundar la opinión ciudadana de que el macropuerto no debe construirse es la actual crisis. Pero se ha encargado un estudio que demuestre que la obra es rentable a algunas consultoras, tal y como nos cuenta La verdad en este enlace. Eso sí, ya dejan caer que "El Gorguel sería competitivo al reducir costes laborales y aumentar la productividad", con lo que el famoso argumento de que va a ser un polo de generación de empleo, que están vendiendo en una Cartagena en crisis, resulta ser falso desde el principio.

También La Verdad recoge las declaraciones de la coordinadora local de IU, reclamando al PSOE que adopte una postura clara sobre el asunto, como podemos leer aquí.